domingo, 25 de enero de 2009

Lluvia




Estas cerca, te siento...
Tu aroma me avisa que estas llegando.
Los destellos de tu escolta lo confirman.
Los suspiros traen la brisa a mi piel.
Tu perfume lo penetra todo
Y tus pasos se hacen estruendo en el camino
Desorientada mi mirada te busca.
Te siento, te espero...
Tu aliento detrás de mi, avisa.
Tus brazos buscando mi mano.
Tus lágrimas me tocan la espalda.
Te siento, llegaste...
Me empapas por completo.
Me envuelves y me ahogas.
Precipitada y tan esperada tu llegada.
Tan llena y hermosa tu presencia.
Infortunio de algunos.
Te esperan con ancías los que te llaman.
Y en tu presencia, no me canso nunca de mirarte.
Buscando tocarte.
Tus manos frías apagan mi fuego.
Y en silencio escucho tu cantar.
Me encanta verte ir, por ventana.
Que cuentes tus historias cuando me voy quedando dormida.
Que golpees mi puerta algunas mañanas de primavera.
Como me gusta que estés aquí.



1 comentario:

Anónimo dijo...

La lluvia lava lo que los rayos de sol no hacen mas que sellar una y otra vez. De modo que si hay algo que cambiar, serán mas que necesarias las aguas del cielo.

Como los tuertos explicando los colores a los ciegos,
Asi caminamos la ciudad.
Vos intentabas contarme el olor a lluvia.

Gracias por eso.